— Toda mi vida me has comparado con mis hermanos, y esperas que sea como ellos, que tenga el éxito que ellos tienen y gane la cantidad de dinero que ellos ganan. Para ti, soy como el hijo pobre y sin aspiraciones de la familia — Parece lastimado de verdad.
Esto es muy interesante, porque con solo ver el auto y el apartamento que tiene Milo y su estatus profesional, me imagino lo que tendrán sus hermanos, ya que él se ha autonominado el hijo pobre.
— Nunca te hemos comparado con nadie — Le dice su madre acercándose a él.
— ¿Ah, no? ¿Y con tu hermano? Con él me comparas todo el tiempo, mamá — La señora Caroline parpadea al parecer un poco incómoda.
— Eso es otra cosa, Milo. Es algo profesional y nunca te hemos comparado con él, queremos que trabajen juntos, eso es diferente, él te ayudaría a fortalecer tu potencial — Melissandre me distrae al empezar a reírse.
— ¡Se ha acostado con su esposa, madre! ¡Lo sabes! Tío Iker nunca va a perdonar lo que Milo