Kyle empapado, observó cada movimiento que ella hizo, lo estaba ignorando, se posicionó detrás de ella y vociferó.
—¡Amor!, por favor háblame, grítame, dime algo, no soporto que me sigas ignorando.
Lindsey se colocó frente a él y con tranquilidad manifestó.
—Mañana me voy de tu casa, un abogado te va a traer los papeles del divorcio para que los firmes.
Kyle se pasó las manos por la cabeza, desesperado empezó a caminar de un lado a otro, su mayor temor se estaba haciendo realidad, exclamó perturbado.
—¡No mi amor! No nos podemos divorciar, por favor no, no te voy a dar el divorcio, tú eres mía.
—En la mesa están las pruebas de tu infidelidad, me imagino que tu amante me las mandó de regalo a mi trabajo, solo con esas fotos un juez nos otorga el divorcio, no te preocupes, no quiero nada de ti, solo me llevaré mis cosas.
Kyle se acercó a la mesa y tomó las fotos, temblando ojeó una por una, en las fotos aparecía con Catrina desde que estaba en el evento hasta que entró a su habita