25-ORGULLOSO DE TI.
–Dante, que no cabes, es que eres grandote –le dijo Helen entre risas.
–Si me pongo encima de ti voy a caber si problemas, solo...solo que no quiero aplastar a mi hijo.
Helen se puso seria de momento –¿quien te lo dijo?
–Ashton me lo contó todo.
Ambos estaban acostados en la pequeña cama de hospital, si alguno de los dos respiraba profundo se caían, pero ahora mismo no necesitaban más espacio, ni lugar especial ni nada extraodinario, solo se necesitan uno al otro y la conversación sincera que se debían.
–Te juro que te lo iba a decir, solo estaba esperando a que pasara la noche de hoy te lo juro yo...
Dante le tapó la boca con su mano –cuando yo lo digo, eres una puñetera matraca, hoy el que va a hablar soy yo –hizo una pausa Dante –te lo debo.
–Fui un imbécil, pensé que alejándome te estaba protegiendo, que si hacía el menor ruido posible Andrés te iba a dejar en paz una vez conseguido su propósito, pero ya veo que no es así, eso de decir que estás embarazada de él es otro niv