Capítulo 38: Desacierto

Adriano

Solté una gran carcajada, era increíble que esté sujeto se metiera en todo lo que no le conviene.

—¿Me imagino que está feliz? Por lo que veo logró lo que muchos no pueden, enamorar a la señora —él habla con resentimiento..

—Algo que prácticamente tú nunca podrás hacer, solo eres un chofer y ya —le dije.

—Sé muchas cosas de usted, cosas que seguramente ni la señora ni nadie de por acá sabe —él dice, mientras limpia sus zapatos con la bota del pantalón—. Yo de usted andaría con cuidado, porque sencillamente cada movimiento que haga mal será beneficioso para mí y malo para usted.

—¿Qué es lo que quieres decir? Porque no me gusta que anden con rodeos. Esas cosas no van conmigo, así que te recomiendo que dejes las amenazas para después, o mejor te las guardes en algún lado porque para mí no tienen importancia —le comenté, mientras la miraba fijamente acortando la distancia entre nosotros dos.

—Quiero decirte que no me subestimes, aunque no lo creas puedo hacer mucho más de lo
Leia este capítulo gratuitamente no aplicativo >

Capítulos relacionados

Último capítulo