Con el anuncio de su madre, los hermanos Kaffati se voltearon a ver de reojo, se les nota mucho su molestia, Nataniel forma puños con sus manos y en su mente le dice a su padre que no podrá escapar de él y que donde sea que él esté escondido lo va a encontrar y lo hará pagar, sin importar que su madre se meta entre ellos para intentar defenderlo.

La señora Felicita abrazó a su amada nuera y le hizo saber que no hay prisa, que no se desespere porque no la recuerda, poco a poco lo hará. Los niños la recibieron con mucho amor, la pequeña Lupita le dice que la ha extrañado mucho y que en ocasiones la veía en la televisión y le lanzaba muchos besos para que volviera pronto de su viaje.

— Vamos mamá, te mostraré una bicicleta que mi papito me compró para que la monte en el patio. —Dijo, la pequeña Lupita, entonces Camila para no hacer esperar a la niña que se ve muy emocionada, la acompañó y también se llevó al pequeño Gabriel, es una suerte que de inmediato se haya familiarizado con ellos