Todo es felicidad en la familia Kaffati, todos conviven en armonía, incluso Tamara, la hermana de Camila, llega a visitarles en ocasiones.

Ella le ha pedido perdón a Camila y está de buena manera la ha perdonado porque durante este tiempo ha sido testigo de su gran cambio y su buen comportamiento. Ambas han decidido dejar atrás su pasado y aferrarse a lo bueno que les espera en el futuro en compañía de sus hijos.

Este día es el cumpleaños número tres del pequeño Gabriel y ya se imaginarán ustedes, es una algarabilla total por toda la mansión porque allí se llevará a cabo la celebración de su natalicio.

— Querida, estoy tan feliz de que me hayas convertido en papá, ya son tres años de armonía en mi vida, es por eso que esta noche me pienso emborrachar hasta que el hígado ya no aguante de tanto alcohol. —Comenta Nataniel.

— Por favor, Natán, compórtate, sí. Ya sabes que cuando tomas demasiado te pones loco y la mente se te confunde haciendo estupideces. —Le regañó Camila.

— Amorcito de