Las clases comenzaron como cualquier día, solo con la excepción de que varias personitas en aquel lugar tenían historias que querían correr a contarse cuando se les diera la oportunidad.
Estaban en medio de un examen y Cristian se encontraba estresado al ver que no tenía ni la más mínima idea de qué responder. Lentamente volteó a ver a Camilo que estaba muy concentrado respondiendo.
Se sorprendió al ver que Camilo se levantó de su puesto y caminó hasta el escritorio del profesor y le pasó al maestro su examen.
Cristian quedó perplejo, ¿tan rápido respondió todas las respuestas? Bajó a ver su examen y vio que todo estaba en blanco. Y ni esperanza de poder escribir algo que no fueran estupideces.
“Escriba cuáles son los ciclos de la célula eucariota” leyó. Cristian llevó una mano a sus labios y