Audrey, la niña en su memoria de pocos años, ya era abuela.
Todos ya eran mayores.
Incluso la generación de las nietas de Valencia estaban casadas y tenían hijos.
Si Valencia siguiera viva y viera a sus tres nietas tan estupendas, sería muy feliz.
Ella no tendría que preocuparse por no tener una sucesora.
Ni siquiera tendría que preocuparse por dejar que cualquiera de sus nietas llevara la carga.
Qué pena que Valencia no pudiera ver lo buena que era su descendencia.
William se despertó y supo que no estaba soñando. Todo era real, había conocido a Audrey y se le saltaban las lágrimas.
Pensaba en Valencia y se sentía muy triste.
Valencia hizo el papel de madre criando a Sandra y al final fue asesinada por Sandra.
Daba mucho amor y cariño a Sandra, como a una hermana, incluso como a una hija, confiaba mucho en ella y efectivamente sólo Sandra podía hacer daño a Valencia.
Su hermana Virginia no tenía esa ambición y además era una persona con corazón bueno y bondadoso.
Pero aunque tuviera e