162. Reacción
Rylan
El olor de él todavía estaba en ella.
Aunque era débil, aunque era superficial... era suficiente para mantenerme al límite.
Mi respiración era pesada y mi visión oscilaba entre el rojo de la rabia y el dorado de mi lobo, que intentaba liberarse. Johan. Ese maldito mocoso la había tocado. Tocado. Y yo estaba a punto de cruzar ese pasillo, romper el protocolo de Stefanos y desgarrarle el cuello con mis colmillos.
Pero eso no era lo que Jenna necesitaba.
Ella temblaba.
Temblaba a pesar de que intentaba esconderlo, a pesar de que mantenía la cabeza en alto. Y eso era exactamente lo que más me dolía. El miedo en sus ojos. El pavor que intentaba tragar para no preocuparme, como si su dolor no fuera suficiente para justificar todo lo que yo estaba sintiendo.
"Jenna..." mi voz salió ronca, ahogada por el esfuerzo que hacía para mantener el control. "Necesitas calmarte, pequeña". Mis brazos la envolvían con fuerza y su olor se mezclaba con el mío lentamente, trayendo algo de paz a mi lob