C70- FURIOSO, EXCITADO Y CONFUNDIDO.
C70- FURIOSO, EXCITADO Y CONFUNDIDO.
Después de que Santiago se fue, dos hombres armados tomaron a Emma por los brazos y la trasladaron por un pasillo estrecho hasta una puerta doble con acabados dorados. Cuando la abrieron, la empujaron dentro sin violencia, pero sin cuidado tampoco. La habitación era tan lujosa que resultaba insultante: alfombra gruesa, una cama enorme, luces cálidas, cortinas de seda.
No era una celda, pero era una cárcel igual.
Emma dio un rápido recorrido con la mirada, buscando desesperadamente una cabellera rubia, pero Katerina no estaba.
El miedo le cayó como un bloque en el pecho, pero tragó saliva, porque permitirse sentir miedo no iba a ayudarla, fue entonces cuando vio que sobre la mesa había una bandeja de comida: pan crujiente, caldo caliente y uvas brillantes.
Y el olor era tentador, casi obsceno.
Pero no la tocó.
No era estúpida. Podía estar envenenada, drogada, con cualquier cosa.
Se sentó en el borde de la cama, con los nervios al bo