C20-¿Y QUÉ SI TE SOY INFIEL?
La tensión en el aire era tan densa que casi se podía cortar con un cuchillo. Mason avanzó unos pasos con el rostro sombrío y los ojos clavados en Kenyi como si fuera la peor de las provocaciones vivientes, y Sara, consciente de lo que estaba a punto de estallar, se interpuso.
—Basta, Mason. No hagas un espectáculo.
Él la fulminó con la mirada.
—¿Un espectáculo? El único espectáculo aquí es verte dejarte abrazar por tu amante en mi cara. Olvidas algo, Sara: ahora estás casada conmigo, y me debes respeto. ¡Te ordené que lo dejaras!
Ella arqueó una ceja y soltó una carcajada antes de rodear el cuello de Kenyi con descaro, aferrándose a él mientras miraba directamente a Mason.
—¿Dejarlo? No podría. Él sabe cosas que... tú ni siquiera imaginas.
Los ojos de Mason se oscurecieron, su mandíbula se tensó al límite y el veneno de sus celos goteó en cada palabra.
—Pues procura que lo que sepas con él no te cueste demasiado caro, Sara. No olvides que