~Dominic~
Me he mantenido lejos de mi manada por mucho tiempo, preparando algo diferente para ella, para que esté cómoda, sin malos recuerdos de un lugar donde pasó demasiado.
Mi madre me ayuda a supervisar las cosas con calma, dando instrucciones de cómo deben quedar los muebles y demás.
Ya quiero regresar con ella, la extraño, pero ya casi está todo listo aquí para poder verla.
—Hijo, ¿qué piensas de los jardines?
—Los he visto y creo que a ella le gustarán; le gusta despejar su mente.
—Bien, entonces ya estamos dando los últimos retoques. La manada también se cambió; algunos de los antiguos miembros se fueron, otros se quedaron.
Asentí sin decir mucho; contaba con eso. Creo que han visto demasiado de mi propia familia: la muerte, la esclavitud, los castigos. A ellos nada les asegura que yo, siendo de sangre real antigua, sea igual, aunque no lo sea.
Mi manada por fin podrá mudarse de nuevo a una región menos sombría, llena de vida, donde puedan cazar a disposición.
Estábam