~Alana~
Los párpados me tiemblan intentando abrirlos; puedo sentir cómo la sombra de la oscuridad se desvanece a medida que voy cobrando el sentido.
Lo primero que noto al abrir los ojos es la habitación extraña en la que estoy. Hay un ligero aroma que me cosquillea la nariz, pero no en un sentido agradable.
Cierro los ojos nuevamente hasta volver a abrirlos, recordando lentamente todo lo que sucedió antes de que mi mundo se hiciera negro.
La conversación con Damien, la huida y por último, sus colmillos traspasando mi cuello.
Con movimientos lentos y pesados, levanto la mano, tocando los dos puntos salvajes que ahora me dicen a quién estoy encadenada.
Sin embargo, no es eso lo que me asusta, sino el profundo silencio, inquietante y denso, que invade mi mente.
Kyra está al fondo, dormida, inconsciente. Ya no estoy segura y en su silencio, algo más la acompaña.
Esa sensación de algo roto dentro de mí, como si me hubiesen arrancado un pedazo de mi alma que necesito encontrar a to