Capítulo 301
Por la tarde.

En la oficina de César, Andi despertó en el sofá y se sentó, frotándose los ojos con sus pequeñas manos.

Cuando abrió los ojos por completo y miró a su alrededor, la oficina estaba vacía. César no estaba por ningún lado.

Andi se puso sus zapatos y corrió a la puerta, empujándola para abrirla.

—¿César donde estas?

Pasó por la oficina del presidente y vio a muchas personas trabajando sin parar. Una secretaria le señaló la dirección, así que siguió el pasillo hasta llegar a la puerta de la sala de reuniones.

Justo cuando César terminaba de atender unos asuntos, vio que Andi se había despertado y lo buscaba.

Se acercó y se agachó para abrazarlo.

—¿Ya te despertaste? Su voz, rara vez tan suave y tierna, mostró cariño.

Los altos ejecutivos que estaban detrás del presidente lo miraban, sorprendidos.

¡Este niño tiene los rasgos de César y de Teresa, la gerente del departamento de marketing!

Cuando estaba dormido no se notaba mucho, pero ahora que se despertó
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP