Mundo ficciónIniciar sesiónVerdades En La Sombra
Respirando profundo, Helena tomó su teléfono y marcó.
- James, necesito acceso a los servidores de seguridad de Zeus. Ahora.
- ¿Perdón?
- Los necesito.
- Helena, no sé de lo que estás…
- Consíguelos. – dijo cortante - Porque alguien está usando la empresa de Alexander para enmarcarlo.
Un silencio cargado la siguió. Luego, la voz de James sonó más seria.
- Voy para allá.
Helena abrió la laptop y exhaló lentamente.
Si el enemigo creía que podía manipular la red para arrastrar a Alexander a la caída…
Entonces no conocían lo que ella era capaz de hacer.
James entró a la oficina de Helena como una tormenta silenciosa, cerrando la puerta tras de sí con más fuerza de la necesaria.
- ¿







