Andrei
Que Zyran hubiese encontrado la posible localización de Elise era algo que le agradecería de por vida, que haría que nunca pudiera ponerle una mano encima. Él, más que nadie, tendría que ser mi sucesor regente cuando todo esto terminara, cuando tomara a Elise y a mis hijos y nos largáramos a un lugar donde nadie más pudiera saber de nosotros. Alistair volvería en algún momento, desde luego, pero ni Elise ni yo volveríamos a aparecer.
Ya lo había decidido. No me importaba el consejo ni el poder que este me otorgaba, solo los quería a ellos.
Solo la quería a ella a largo plazo.
Los días que pasé en el hospital, bajo el cuidado de mis médicos y de Zyran, rindieron sus frutos. Me permitieron descubrir la afección cardíaca que heredé de mi padre y que se fue agravando con el tiempo y sufrir la peor de las impresiones. Era bastante probable que Alistair pudiera desarrollarla, lo que hacía más urgente encontrarlos.
—Aunque el corazón esté curado del todo, debes tener cuidado —me