Después de esas indicaciones, me marchó con Nick y el doctor rumbo a mi habitación. Bueno, eso es lo que creo, porque en realidad me lleva a un piso diferente, donde puedo observar a los chicos en la piscina.
— Esta va a ser tu nueva habitación. Como puedes ver, hay un balcón que solo estará habilitado cuando estés acompañada. Pero, no necesitas preocuparte porque las puertas del balcón son inteligentes y por ello, pueden mostrarte tanto lo que estás viendo frente a ti, como otras imágenes de tu preferencia.— Entiendo.— La persona que nos está acompañando es un psicólogo.— No estoy loca. Bueno, eso creo.— Si me permite decirle, señora Thompson, los psicólogos no estamos nada más para las personas que tienen un trastorno mental. Ya que, también ayudamos en la aceptación personal y las dificultad