Nunca he sido empático, el dolor ajeno no me importa ni suelo pensar en los demás. Sin embargo, cuando se trata de ella no puedo evitar involucrarme como si su dolor fuera también el mío.

Jamás pensé que en un cuerpo y un alma tan pequeña pudieran caber secretos y momentos dolorosos tan inmensos.

Quien a pesar de todo eso, tiene el valor de sonreír como lo hace siempre.

Incluso con esta realidad que me cuesta aceptar, sabiendo que no es para mí, no puedo evitar pensar en lo parecidos que somos y lo mucho que me complementa. Ambos sabemos lo que es una pérdida y ambos tenemos una conexión cercana a nuestros respectivos abuelos.

—Cadenza, así te llamaba tu abuela ¿no es así? Te llamaré Cadenza cada día, nunca más estarás sola.

—Eso no es necesario además ese nombre está reservado solo para ella. Me agrada que me llames Cadence a secas, suena...Encantador con tu voz.

Desde que llegó a mi vida no ha hecho más que sorprenderme y llenarme de momentos cálidos, solo con ella me dan ganas de sonreír como si su alegría fuera contagiosa.

—Cadence. — Aunque ya lo he dicho muchas veces es la primera vez que ella me da permiso de hacerlo.

Ella ríe un poco y pone su dedo índice en su labio como si fuera un secreto y me guiña un ojo.

—Pero no abuses de ello, es un poco vergonzoso.

—Cadence –Repito de nuevo cautivado como si su nombre fuera un hechizo.

—Ery... —Ambos nos tomamos de la mano y nos besamos en los labios, es un leve roce, ambos tememos que el veneno haga daño al otro sin embargo no puedo contenerme, siento que en cualquier momento puede desaparecer y no quiero arrepentirme de nada.

—Aunque no confío del todo en él, te prometo que voy a liberar a Sieg.

En mi pecho decir eso deja una sensación pesada. Solo por ella aceptaría darle beneficio de la duda a ese desgraciado.

—Gracias, esposo.

“Esposo” una palabra tan hermosa que a la vez me recuerda amargamente que solo es una fachada. Cuando pienso en ese hombre cuyo rostro es igual al mío, siento como si mis entrañas se hicieran un nudo.

—Aún tengo una duda más.

— ¿Y qué quieres saber?

Respiro hondo y dejo el aire colocarse en mis pulmones. Incluso si la respuesta no es algo que llegue a gustarme debo saberlo.

—Sobre el tal "señor Eardwulf"— Respiro hondo de nuevo— Si Sieg fue moldeado desde el padre de este y yo de él... ¿Qué es lo que opinas de mí?

— ¿Por qué preguntas eso?

‘Porque es un masoquista’

¡Deja de fastidiar, Shawn!

—En tu relato hablas de él como si fuera alguien despiadado incapaz de entender el sufrimiento ajeno. Si me creaste a partir de él, entonces es por eso que te desagradé desde el primer día.

¿Qué es lo que piensas de mí? ¿Aún me ves igual a él?

‘Es obvio la respuesta, si no ¿cómo podría aceptar tanto besuqueo?’

¡Se lo pregunté a ella, lobo entrometido!

—Ahora que lo pienso hubo un tiempo en que sentí algo parecido al desagrado cuando vi la cara de mi jefe en el Alfa. —Ella dice murmurando como si pensara en voz alta— Si, eso fue al principio...

— ¿Y por qué ya no me crees un patán? Si somos personas iguales entonces yo debo ser igual a él ¿No es así?

En mi interior sé que Eardwulf no es como Cady lo piensa, sin embargo, sé que debo escucharlo de su propia boca. Lo que opina de mí, si aún ve en mí su sombra o si puedo ser algo más.

—Es cierto, los dos son muy parecidos.

Lo sabía.

—Idénticos físicamente aunque tú eres mucho más joven.— Dice con una sonrisa burlona— Ambos me juzgaron a primera vista y ambos me creyeron una persona irresponsable, en su caso una prepotente que dejó la universidad solo por capricho y no por necesidad. Pero ya no creo eso.

— ¿Entonces por qué me ves diferente ahora?

—Porque tú viste a través de mí. Aunque al principio me juzgabas de mil maneras siempre intentaste comprenderme y... La noche  en que nos casamos aceptaste ser mi aliado.

Recuerdo esa noche como si fuera ayer, incluso puedo recordar cada sensación, cada latido.

—Nunca fuiste alguien que me exigiera contar todo desde el primer día, tampoco dudaste de mí aunque tenías mil razones para hacerlo. Para empezar soy un intruso en el cuerpo de tu pareja destinada…yo ni siquiera debería estar aquí.

“Ni siquiera debería estar aquí” con solo esas palabras siento punzadas en mi pecho.

—Eres mi pareja, Cady. —Digo firme y claro acariciando su mejilla, más que una afirmación suena como una orden.

Ella me mira sorprendida y se ruboriza, por la Diosa, ella se ha portado un poco tímida… cuando voltea hacia abajo evitando mi mirada acomodo un mechón de su cabello detrás de su oreja y ahí siguen. Sus preciosos ojos color ámbar.

—Eres un poco bruto y a veces me haces avergonzarme por tu forma de hablar y decir las cosas tan directamente. Aun así eres completamente honesto y no te ocultas bajo una máscara ni me miras debajo de ti. 

Maldición otra vez está comparándome en su mente con mi rival.

—Me agradas por eso.

Abro los ojos sorprendido y no puedo evitar mirarla buscando algún rastro de mentira en ello.

— ¿Incluso después de cómo te traté con el acónito?

—Te arrepentiste ¿no es así? Incluso entraste en el limbo de mis sueños y estuviste ahí todo el tiempo. Me insististe por muchas ocasiones, sin conocer mi mundo te adaptaste y me seguiste. Me pediste matrimonio para que reaccionara y te recordara y cuando me sentí perdida al escuchar las razones de Josh Bury... que por cierto eso me recuerda que tengo algo pendiente que decirle a Jerome, tú me abrazaste. Aunque era un sueño se sintió más real que nada.

—Cady ese no era...

— ¡Haz hecho por mí tanto, Ery! ¡Incluso más de lo que puedes imaginar! —Al notar que ha elevado la voz tose un poco y vuelve a tranquilizarse— Por eso confío en ti y no te veo más como mi ex jefe. Tampoco eres simplemente el protagonista que escribí, eres mucho más...

¿De verdad lo dijo? ¿No soy su sombra?

—Cady... Tú también eres mucho más que un alma atrapada en el cuerpo de quien debió ser según la historia mi pareja ¡Eres MI pareja, Cady!

Yo también parezco perder el control de mí mismo y noto que mi voz se ha elevado. De inmediato toso para calmar la agitación en mi interior.

—Y como mi pareja eres especial, por eso haría lo que fuera para salvarte Incluso si me cuesta la vida. —Tomo sus manos entre las mías y las mantengo cerca de mi mentón.

—Lo sé, lo supe cuando te vi en mi sueño tomando todos esos turnos.

‘Pobre, mi madre cree que ese mérito fue tuyo’

—Puedo hacer mucho más que en ese sueño, Cady. Puedo ser mucho más que lo que fue él para ti.

—No hay comparación entre los dos, Ery.

—Claro que la hay, pero yo seré mucho mejor cada día si me eliges. Te lo prometo.

—Ery, para mí eres...

¡¿Sí?! ¡Continúa! ¿Qué soy para ti? La emoción en mi interior crece y no creo poder contener más mi deseo de besarla.

—Mi mejor amigo.

‘Eso debe doler, aguanta ahí soldado’

— ¿…amigo? —Juro que siento como si me hubieran aventado al lago para enfriarme.

—Ajá, nunca tuve un amigo varón así que ¡felicidades, eres mi primer mejor amigo!

Con la inocencia que tiene en esa cara tan linda me es imposible enojarme, aun así siento que esa palabra es como la estaca de madera al corazón de un vampiro. Por algún motivo duele, es pesada e incómoda.

"Yo no quiero ser solo tu amigo" mi interior brama por decírselo.

—Sabes yo no suelo confiar en los hombres, por algún motivo me daba ataques de pánico al estar cerca de uno. Contigo es diferente por eso me hace feliz que seas tú mi primer amigo después de Hershey/Sarah.

‘Mi madre es tan inocente que no sabe cómo acaba de aplastarte, no será fácil esto, Ery’

¡Que no es tu madre, maldita sea! ¡Te voy a bloquear!

—Puedes confiar en mí, Cady. Siempre protejo a mi manada y si son mis mejores amigos o los considero familia soy mucho más cuidadoso con ellos.

Miento.

Aunque Jerome y Milo son mis amigos y son como mis hermanos hay mucho que no les he contado ni les contaré jamás.  Además, cuando me enfado son los primeros en recibir mi ira.

‘Lástima que mi madre se pone brava si abusas de los entrenamientos para desquitarte’

¡Deja de llamarla tu madre!

—Y por eso quiero que me acompañes a beber hasta caer.

— ¿Disculpa? —Con Shawn llamándole madre y sacándome los nervios no escuché salvo eso último.

—La misión menos extraña y pervertida es achisparse. Creo que significa que debemos embriagarnos.

Ah… está hablando de su misión.

—Cady, no sé cómo decirte esto pero... Los lobos podemos tolerar el alcohol.

— ¡¿De verdad?! ¡¿Entonces cómo voy a superar la misión?! ¡Solo tengo 48 horas para cumplirla!

—Existe un tipo de cerveza especial que puede hacer embriagar hasta al Alfa más resistente.

— ¿y en donde puedo conseguir uno?

—Yo lo conseguiré para ti.

‘¡Cómo puedes mentirle, Ery! ¡Sabes que ese alcohol es ilegal!’

— ¡¿De verdad?!—Dice con los ojos brillosos y una gran sonrisa.

—Sí, son los beneficios de tener un Alfa poderoso y maravilloso como yo a tu lado.

— ¡Maravilloso y lo que le sigue! ¡Consigue esa cerveza y haremos una fiesta de bebidas de mejores amigos!

No sé por qué eso de "Mejores amigos" me suena a que he bajado de categoría.

‘Debería preocuparte más hacer una promesa que no puedes cumplir… por tercera vez’

Cady se levanta y se ríe cuando descubre que su pierna está dormida por la posición en que estuvo todo el rato. Yo también me siento extraño y no es solo por el molesto hormigueo en mis piernas y no, no es una erección.

—Bien, voy a hablar con Jerome. Tengo una charla pendiente que no puedo atrasar más ¡Nos vemos más tarde, mejor amigo!

Mientras Shawn ríe como desquiciado yo no puedo evitar sentir como si me diera un montón de punzadas en el pecho.

Ni siquiera sé por qué me siento de esta forma al estar en la zona de amigos para ella, debería estar orgulloso de tener el honor de ser su primer… amigo.

<<Zona de solo amigos, también conocida como la Friendzone, es cuando aquel por quien tienes afecto te tiene en una línea trazada de amistad, es decir que no le interesas como algo romántico ni lo harás nunca>>

—Nadie te pidió esa información, Dios chismoso.

Entre Shawn, ese Dios y esa mujer me van a volver loco.

***

Además del problema de estar en la frontera de la amistad con esa mujer inconsciente tengo un problema más grande, tengo muchos más problemas pero solo me preocupa quedar bien con ella. Es mi primera misión como… amigo.

Demonios, cómo detesto esa palabra…

‘Además que le prometiste conseguir algo que no es posible, Ery’

Es cierto, debido a los ataques sorpresa de vampiros y manadas rivales está prohibido todo aquello que pueda debilitarnos. Eso incluye estar embriagados, de hecho nunca he estado alcoholizado antes.

Ahora el problema es conseguirlo sin que mi Beta se entere o me cantará de todas por hacer algo tan irresponsable.

<<Si el huésped quiere cerveza especial puede llevar a cabo otras misiones y ganarla como recompensa>>

— ¡Vaya, hasta que te entrometes con algo que si es relevante! ¿Y esas misiones cuáles son?

‘Ery, no lo hagas…’

<<Misión especial 1) Habla con tu ex por al menos 30 minutos, 2) Habla con tu hermano por al menos 30 minutos o 3) Evade al huésped una semana>>

¡¿Es broma?! ¡Ninguna de las tres es buena opción!

<<Selecciona una de las tres, tienes treinta segundos para elegir o la oferta expirará >>

<<30, 29,28...>>

En cuanto cierro los ojos presiono la opción menos horrible.

<<El Alfa ha seleccionado la opción 1, seleccione el nombre de su objetivo para cumplir la misión, tiene 20 segundos para elegir>>

<<20, 19, 18...>>

Ante mí aparece una gran lista con nombres de distintas lobas… no recordaba haber salido con tantas. El sistema incluso ha contado a mis noches casuales cuyos nombre ni siquiera me sé.

'Habría sido mejor hablar con tu hermano, que más daba estar encerrados por 30 minutos'

Jamás voy a conversar ni tomar el té con ese buitre.

'Entonces evadir a Cady'

Su misión tiene un plazo de 48 horas, Shawn. Además no podría soportar estar lejos de ella más de 30 minutos.

<<La misión ha sido activada, la penalización por incumplimiento es perder la capacidad de tener una erección por tres meses>>

¡¿QUÉ?! Decimos Shawn y yo al mismo tiempo.

<<Adicionado a la penalización, el celo de su pareja comenzará el mismo día>>

¡Ese Dios es un demonio!

'Entonces si no haces lo que ese tal sistema te pide, puede castigarte con lo que más te importa e incluso dejarte impotente por diversión... estás j#did0, Ery ¡Te dije que no te metieras con ese Dios extraño!'

***

En las mazmorras mis pasos resuenan y se detienen cuando llegan cerca de una de las celdas.

—Alfa Sieg Avery.

—Alfa Ery Avery.

Ambos nos vemos sin poder iniciar una conversación decente por varios minutos.

—...

—No lo hiciste ¿Cierto? —Digo dando finalmente el primer paso.

—No, yo no llené de acónito.

—Lo sé

— ¿Me crees?

—Nunca creeré en ti. Pero sí creo en Cady.

Nuevamente nos quedamos en silencio un momento que me parece eterno. Finalmente vuelvo a dar el primer paso para terminar rápido con esto.

—Contesta con la verdad y te dejaré salir de aquí... ¿Cuál es el verdadero nombre de mi madre?

Aunque no hay respuesta y ese hombre parece tener el control, la fuerza con que estruja los barrotes delata su molestia.

—No sé de qué me hablas.

—Es mi madre, tengo derecho a saber la verdad. Ya no soy un cachorro que no pueda hacer algo con la verdad.

—Quien sea que te haya dicho esas mentiras---

—He llamado a la madre de la que fui privado incluso hasta el momento de su muerte por un nombre falso, al menos merezco saber el nombre de quien me dio su vida.

Aunque deseo gritarle por ocultarme algo tan importante tanto tiempo, yo también soy un experto en guardar mis emociones detrás de una máscara. Un Alfa no puede verse débil ante otro Alfa, no importa cuán afectado se encuentre.

—Es verdad tu madre merece que al menos lo sepas. En realidad nunca encontré su nombre pero si supe su origen.

—Habla.

—Gudrun era un sirviente que acompañaba a la princesa licántropo pérdida.

¿Mi madre era un sirviente?

—Sí, un sirviente de bajo rango. Nadie aceptaría que mi pareja destinada fuera un renegado. Entonces le di otro nombre y oculté su origen.

—Imposible... ¿Un alfa “íntegro” como tú le mintió a toda la manada?

—Un lobo necesita de su pareja. Nuestro lobo se fortalece cuando estamos a su lado y también se debilita cuando se aleja.

Ver a ese maldito es como verme a mí mismo hace unos meses antes de que ella llegara a cambiar mis planes.

—No voy a negar que me atrajo desde el primer momento, sin embargo la acepté como mi pareja solo porque mi lobo se negó a rechazarla. Desde un principio debí elegir una pareja más adecuada pero me ganó la ambición de poseerlo todo, el poder y a ella.

DESGRACIADO.

—Yo era igual que tú, Alfa Ery, solo pensaba en la manada. Hasta que Gudrun Shätzchen llegó. Al principio fue por motivos egoístas y después...

— ¿Por qué me dices todo esto ahora?

—Porque allá afuera está todo el consejo. Lo cual me recuerda que tenemos un pago pendiente.

—Dijiste que me dirías tus términos. Dime tus demandas.

—Si quieres conservar a tu pareja sigue mi guía, Alfa. De lo contrario, ellos se encargarán de destruir a tu Shätzchen como lo hicieron con mi Luna.

<< ¡DING, DING, DING!>>

<<El alfa superó la misión. >>

<<Puede reclamar cuando guste la recompensa: Cerveza a prueba de lobos y--->>

¡¿Cerveza?! ¡¿Entonces para qué me diste la otra misión?!

‘Para hacerte pasar un mal rato al amenazarte con dejarte impotente’

<<Te lo dije, Alfa. Tu vida me pertenece ahora y nada es más importante para mí que un buen espectáculo>>

¡Solo quiere ver ese Dios extraño como caigo en sus trampas!

¿Y ahora qué hago? ¡Tendré que buscar a Freya y aguantarla 30 minutos!

— ¡Ery!

Mal momento para que ella quiera estar cerca de mí.

— ¿Qué ocurre, Cady?

—Tengo una nueva sugerencia para la manada.

—Adelante.

[Sin importar el rango, un lobo puede elegir lo que desee hacer]

“¿Qué es esto?” es lo primero que pienso al ver escrito por ella un largo discurso sobre las posibilidades de cambiar de profesión en la manada ignorando su designio divino por nacimiento y rango.

—Alfa Ery, por favor deja que Milo sea Chef de la manada.

Diosa… ¿Por qué me has dado una pareja tan extraña y problemática? ¡Ahora quiere que mi Beta sea cocinero! Shawn ríe y se retuerce de gozo en mi cabeza mientras me contengo cerrando el puño.