Mark había estado pendiente de todas las noticias que aparecían en los diarios, las redes sociales y la televisión sobre la próxima boda de su ex esposa con su rival de negocios. Se había obsesionado con el tema al punto de ser lo único a lo que dedicaba su tiempo durante todo el día, aunque intentó aparentar ante Isabel que no sabía nada del aquella noticia a la vez que intentaba aparentar que todo estaba bien, pues su plan era llegar ese día y detener esa boda, pero para lograrlo, nadie cercano a Alicia o Anderson debía enterarse o aumentarían la seguridad impidiéndole entrar.
Luego de averiguar con discreción quienes de sus conocidos asistirían a aquella boda, logró convencer a un diseñador que le dieran la entrada de invitación que él tenía y a cambio, Mark prometió hacer que su casa de moda aprobara una de las colecciones del diseñador y la presentara en un próximo desfile.
Teniendo la invitación en mano con la se escurriría en la boda, preparó todo para