—Pregunta, —Mauricio asintió brevemente.
—¿Tienes hijos con Catalina? —le preguntó Sergio, con una mirada penetrante.
Valeria pensaba que eran los periodistas quienes escribían tonterías, que tales cosas no podrían suceder, pero cuando Sergio le hizo la pregunta a Mauricio...
No pudo evitar apretar su copa de vino, esperando la respuesta de Mauricio.
En la mesa de centro se disponían cinco vasos de whisky. Si la persona que decía la verdad no quería responder a la pregunta, debía beber los cinco vasos de un solo trago.
Mauricio guardó silencio por unos segundos, luego de repente tomó uno de los vasos de whisky de la mesa.
Y luego el segundo...
Era una pregunta tan simple, pero se negaba a responder.
Esta actitud implícita hundió el corazón de Valeria.
Iliana, de repente, se dio cuenta de que Iván no dejaba de mirar furtivamente hacia Valeria. Le dio un golpecito en el hombro y dijo:\N—Señor Domínguez, ya me había dado cuenta fuera en el bar, siempre estás mirando a Val. Ahora que estam