― “Juro por la diosa Selene que no te haré ningún daño” ―dijo Tabatha al mismo tiempo que se sentaba en la silla que estaba junto a la cabecera del comedor
Con un gesto solemne, la mujer dejó frente a ella un cuenco de agua y una pequeña daga que tenía algunos símbolos ceremoniales.
― “Sólo deseo ayudar. Prometo responder a todas tus preguntas” ―dijo señalando el asiento frente a ella
― “No tengo nada que preguntar” ―dijo Dante retrocediendo un par de pasos ― “Si lo que dice es verdad y la muerte ya no me acecha, entonces creo que podré comprobarlo por mi mismo con los resultados médicos que recibí esta mañana” ―
― “Es cierto, pero eso no te ayudará a entender el motivo del por qué tú vínculo de pareja se ha visto fracturado” ―canturreó la mujer al mismo tiempo que t