Capítulo 13. Esposa ¿de mentira?
Agnes, con cuidado, rescató la carne de la sartén donde se chamuscaba todavía por el calor residual, cortó algunos trozos, y la colocó en una fuente de cerámica.
Le pidió ayuda a Mikhail:
-Me consta que eres bueno con los cuchillos, así que, si estás de acuerdo, ayúdame con las verduras.
Él sonrió.
-Supongo que mientras no implique nada con llamas, puedo intentar.
Ella le tendió una tabla de madera y una cuchilla, y cortaron cebollas, zanahorias y otros vegetales para colocarlos en la fuente junto a la carne.
Luego, la joven recorrió los frascos de especias, oliendo y probando, sazonando la comida para después dejarla cocinarse en el horno con tranquilidad. Se deshizo del pan quemado, y puso a preparar nuevas tostadas.
-Segunda oportunidad, Mikhail. Vigila que no se quemen.
-A la orden, señora Kasparov.
Ella negó con la cabeza mientras sonreía. Tenía que reconocer que esto era divertido. Y nuevo. Nunca había estado así con nadie.
Él tampoco.
Agnes cortó el queso en finas rodajas y l