Final feliz. 2
Cuando Owen regresó a su oficina, se encontró con su belleza embarazada profundamente dormida en el sofá, se veía adorable, con ese pequeño puchero que hacía cada vez que soñaba. Esperaba que fuera algo bueno, sin darse cuenta, se quedó de pie frente a ella por casi cinco minutos, pensando en cómo sería su vida si no la hubiera conocido. El año pasado no tenía muchas proyecciones más que trabajar; ahora tenía una infinidad de planes, tantos que resultaba abrumador, por calenturiento le había arruinado el final de carrera a Edneris, pero en su lado egoísta estaba feliz de tenerla consigo. Amaba su sonrisa amorosa, esa que aparecía cada vez que lo veía.
Al darse cuenta del tiempo que llevaba observándola dormir, se rio de sí mismo, se sentía como un viejo acosador incapaz de dejar de mirarla, dejó las bolsas sobre el escritorio y sacó una bandeja para comenzar a comer; no pensaba despertarla. Ella hacía trabajo doble; mientras respondía llamadas y organizaba su agenda profesional, tambi