Orgulloso de mi fatina.
-Enzo Di Rossi -
Escuchar a Alma hablarle así a Thomas y mantenerse Impoluta, sin que le afectara toda la mierda que este tipo le decía frente a todos me infló el pecho como un pavo real,ñ. Es que mi fatina hablaba con tal tranquilidad que hasta me preocupé de que saliera huyendo, pero eso no pasó. Es más, se disculpó por ella y también por ese imbécil y lo dejó callado en su asiento, doblegado a comer mirando su plato, pues todos ahí en la mesa lo queríamos matar.
Si no fuera porque Leo me llamó a hacer mi pequeño discurso lo habría molido a golpes, ganas no me faltaban, pero mi bella fatina me lo pidió con la mirada y yo acepté, pero sería sólo por esta vez.
Luego del incómodo momento, terminamos la cena y al parecer todo quedó zanjado. De verdad lo esperaba, pues mi fatina no se merecía lo que dijo ese imbécil.
Cuando las mesas estaban recibiendo el postre, comenzó la música y como ya le había presentado a Sia, mi fatina quedó deslumbrada al escuchar los acordes de Cheap thrills