Liam Jones.
El ambiente en el bar era melancólico, un violinista tocaba una pieza musical que tocaba el alma.
Entre cada sorbo de whisky dejaba salir un suspiro profundo.
Cada nota que tocaba ese músico estaba impregnada de una tristeza que me era familiar.
Desde la barra veía a la gente charlar y disfrutar de su tiempo, ajenos a las horas que pasaban.
“ ¡Cuánto vacío en mi corazón!” , pensaba mientras esas notas me embriagaba de nostalgia.
Fue en medio de ese trance que lo ví, al otro extremo de la barra.
—¿Y a este qué le pasa? apenas empieza a ser novio de Ava, ¿Ya andará despechado?
Brad se levantó y caminó. Hacia mí con el ceño fruncido .
Cuando lo vi venir hacia mí de inmediato tuve la seguridad de que habría problemas.
—Contigo quiero hablar —dijo, y sus ojos chispeaban de enojo.
No sabía qué pasaba por la cabeza de Brad, pero supuse que se trataba de Ava.
Pensar en ella me hizo sentir miserable . Ella era un tema delicado entre nosotros.
—¿No sientes cargo de conciencia por lo