Ava Hills
Recuerdo las palabras de mi hermana mientras miro por la ventana.
Hay mucha verdad en su lógica, de nada me vale haber recuperado a Liam si no le soy sincera.
El sol se está poniendo, y con él, también se apagan las últimas luces de mi miedo.
—Mañana lo haré.
Pero, ¿cómo se dice algo así? La idea de enfrentar a Liam me da escalofríos.
—Ava, tienes que hablar con él —me recuerda Selene, sentada en el borde de mi cama.
—Lo sé, pero… es complicado. Lo que siente por Estrella no es lo mismo que lo que siente por mí —respondo, sintiendo un miedo que me paraliza..
—Pero… tú eres Estrella. No puedes seguir ocultarlo. Te mereces vivir tu felicidad.
Se dice fácil, pero la realidad es muy diferente.
Mi corazón late rápido solo de pensar en el momento en que le revele la verdad.
No es solo un secreto. Es la probabilidad de que Liam me de una soberana patada por el trasero.
El miedo consume en la oscuridad de mi habitación, el temor crece como una sombra.
¿Y si me rechaza? Esa pregunta