Liah
Estaba agotada por todos estos días, miles de preguntas que me hizo mi padre que supe esquivar sobre Kira, sus viajes. Luego Demetry con una invitación extraña a tomar helado, la cual no acepté porque preferí concentrarme con Emma y mi tía, en mi vestido de novia. Y por último, una pelea más con Kira, la cual me dejó pensando en muchas cosas que no sé si creerle o no.
«Él es mío, está amarrado a mí. Me ama y quiere estar contigo por venganza».
Eso no es una novedad, pero lo que dijo de Demetry es lo que me sorprendió.
«Liah, no te cases. Mira, Demetry y yo nos divorciaremos, ya está hablado. Resulta que ahora te quiere a ti y no me molesta, es más para ti, pero no te dañes la vida con Leandro».
¿Mentira? Nadie puede dejar de querer de un momento para el otro. ¡Ay, no! ¿En qué momento se me enredó la vida?
—¿De qué hablas? —preguntó mi tía.
Llevamos horas sentadas hablando de cómo quería la boda, de los preparativos y sobre todo tomándome medidas para mi vestido de compromiso.
—Yo