Mundo ficciónIniciar sesión—¿Quieres ir a verlo?
Álvaro salió de su cuarto, alertado por un ruido extraño y al llegar a la sala, vio a Sarah parada mirando por el gran ventanal que daba al jardín. Parecía tan sola y desamparada que él hubiese hecho lo que fuera necesario para hacerla feliz.
—No —contestó Sarah simplemente, sin dejar de mirar por el ventanal.
—¿Segura?
Ella se volvió y lo miró de frente, se veía tan triste.
—Sebastián está convencido que maté a su papá y que fui su amante, me detesta, cree que tú y yo…
—Y eso te duele.
—Me molesta. Él ha tenido un montón de mujeres en estos años, mientras yo, pacientemente, lo esperaba. A veces volvía, pero no tardaba en irse nuevamente, atormentado por los celos y la falta de confianza. Cada vez me lastimaba m&aa







