Punto de vista de Adrian
Apreté su rostro contra el mío, sin querer soltarla jamás. Era tan evidente lo cerca que había estado de perderla; si no me hubiera dado cuenta a tiempo, la habría perdido. El cronómetro marcaba solo siete minutos, y desatar la nota que le ataba las manos estaba consumiendo la mayor parte.
Me sorprendió que no pareciera tan asustada como yo. Su rostro estaba inexpresivo, aunque había visto el alivio cuando entré, pero esa sería otra historia. Ahora mismo necesitaba sacarnos de allí. Ya en la cabaña, recordé todo lo que debería haber recordado.
Este era el mismo lugar donde a veces había crecido; había sido mi pequeño refugio vacacional cuando desconocía la realidad de a dónde pertenecía. Pero ahora recordaba con qué rapidez llegábamos aquí, y había algo más que sabía: nadie más sabía dónde estábamos, nadie.
Mientras la desataba, me preguntaba quién podría estar detrás de todo esto. Era como si la respuesta estuviera ahí, en el fondo de mi mente, esperando, p