Me desperté y lo primero que ví, fue el rostro de mi madre lleno de preocupación, mire a mi alrededor y estaba en la habitación de un hospital.
Yo empecé a llorar otra vez, y mamá me abrazo con fuerza.
— Amor todo va a pasar — Me dijo ella para tranquilizarme.
— !Quiero la verdad! — Exigió saber mi padre.
Yo me separé de mi mamá y lo mire, él estaba en un rincón de la habitación, desde allí me miraba furioso, yo jamás lo había visto así.
— Perdón papi — Le dije.
Él camino a mi y se detuvo frente a la camilla.
— Quiero saber la verdad Claudine — Me volvió a repetir.
— Me enamore de él, yo... pensé que me amaba — Le dije llorando.
Papá se puso rojo y miró a mi madre.
— ¿Tu ya lo sabías? — Le pregunto furioso.
— Deja de gritar Claudio, la estás poniendo nerviosa — Le dijo mamá.
La puerta de la habitación se abrió y entro el doctor, el nos miró y sonrió un poco.
— Aquí están los resultados de los exámenes que se le hicieron, y todo está bien, solo tienes un par de golpes, y no te preocupe