Cada paso entaconado que Beatrice da por el palco VIP hacia los dos hombres, se siente como una punzada en su corazón, un cubo de hielo en su columna vertebral, derritiéndose hacia hacerle humedecer los labios una vez más.Porque allí está él. Raúl Meléndez, prominente. Vestido con un pantalón caqui, saco del mismo tono, camisa blanca con los primeros tres botones fuera, zapatos casuales blancos. Parece informal, pero no lo es. Mientras su mirada lo recorre de pies a cabeza, Beatrice no cree que este hombre pueda ser informal ni con shorts.«Verlo así es un espectáculo, ¿cómo será sin ropa?»Sus mejillas se calientan ante ese pensamiento rápido, e intenta sonreír cuando lo tiene a un metro.—Señoritas, bienvenidas, ¿quieren algo de beber? —cuestiona John, alegre.Raúl traga seco con la mirada en Beatrice, deja la bebida a un lado y palmea a su amigo.—¿Quieres embriagarlas tan pronto? —bromea, dando una sonrisa pequeña. Luego estira su mano hacia Beatrice—. Señorita Durán, espero que
Leer más