VANESSA GARDNERMe sentí como en una vida que no era mía. Lo que estaba viviendo con Noah parecía tan irreal. Se movía con elegancia y la frente en alto, ofreciéndole una sonrisa cargada de suficiencia a cada persona que se acercaba a saludar y preguntar por su lesión, mientras sostenía con fuerza mi mano, llevándome a su lado, protegiéndome debajo de su brazo cuando la gente se juntaba a nuestro alrededor. Había visto su transformación en caballero durante esa semana. Me ofrecía el asiento mientras sus ojos parecían derretirse de un amor que no alcanzaba a comprender, o más bien, sentía que no me lo merecía. Siempre había un beso casual en alguna parte de mi cuerpo, como si fuera igual de necesario que respirar. Cuando estaba detrás de mí, mis hombros desnudos sentían la presión de sus labios. Cuando estábamos sentados a la mesa, desayunando con algunos de sus colegas, no soltaba mi mano, besando mis nudillos en diferentes ocasiones, sin desconectarse de la conversación, incluso so
Ler mais