Capítulo 13 —Un OscarNarrador:Eros se apartó despacio, como si le costara dejar de besarla. Salió del coche sin decir nada, cerró la puerta de su lado y rodeó el vehículo con pasos medidos, conteniendo algo que ya no sabía cómo volver a meter bajo la piel.Cuando abrió la puerta del acompañante, se agachó un poco y le extendió la mano.—Ven.Sasha dudó apenas un segundo. Luego apoyó su mano en la de él y salió del coche.Afuera, el aire parecía más denso, más cargado. Eros no le soltó la mano. La mantuvo así, quieta, frente a él. Y entonces le acarició el rostro con la yema de los dedos, lento, como si estuviera reconociéndola después de años ciego. El pulgar le rozó la mejilla, la línea de la mandíbula, el mentón. Le sostuvo el rostro entre las manos y la miró entera. No solo los ojos. Le miró la boca, las pestañas, los pómulos, el temblor apenas perceptible en la garganta.—Mírame —le pidió, casi en un susurro.Y Sasha obedeció. Tenía los ojos húmedos. No de llanto. De algo más pr
Leer más