Pov: Christopher Cada molécula de mi cuerpo ardía, cada parte de mi piel quemaba. Sentía que mis pulmones estaban contraídos y que el aire no entraba. ¿Había sido un imbécil? Sí, el peor de todos; no la había escuchado, estaba cegado por celos que no quería admitir y por una rabia que fue provocada por otros. Había perdido a una mujer que me amó y, sin darme cuenta, me había convertido en un espectro andante. Todo eso lo comprendí en ese instante, mientras sostenía en mis brazos a tres niños con olor a bebé y mejillas sonrojadas. No sabía qué diablos decir, ni cómo reaccionar. Si no hubiera sido por Michael, me habría convertido en el asesino de esos tres niños perfectos. Las gemelas se parecían a Alisson; era evidente, pero Nathan... Nathan era exactamente yo en versión pequeña. —Sí, soy su padre, pequeños minions. Siento mucho… —mi voz se quebró y descubrí que era más sentimental de lo que pensaba—, siento mucho haber llegado tarde. —No importa, papá, es mejor tarde que nunca. Eso
Leer más