-Anne, yo...-
-No me importa lo que tengas para decir, Alexander. Lo nuestro se acabó-
-¿Ibas a mantenerlo en secreto?- volvió a insistir. ¿Por qué le dolía tanto? Si al fin y al cabo, nunca había querido ésto.
-No había decidido qué hacer. Me enteré ayer y luego sucedió lo del ataque... Y hoy... Bueno, ya sabes- lo miré con odio.
Tomó su cabello entre los dedos, un gesto que hacía cuando estaba nervioso y no sabía que decir.
-Si lo hubiera sabido, las cosas no habrían sido así...-
-No te atrevas a culparme- lo interrumpí señalándolo con mi dedo índice-No sé que motivos te llevaron a actuar así, pero sé que definitivamente no es mi culpa-
-Claro que no- ablandó su rostro y dió un paso hacia mi -No es tu culpa, es toda mía. Si pudiera explicar