Alejandra.
La música del lugar no es exageradamente fuerte como lo esperaba, pero no deja de resultar un poco molesta al combinar las luces, los aromas y la gente del lugar, me siento como un pez fuera del agua, rodeada de jóvenes que bailan y beben, el atuendo no tiene el efecto deseado de pasar desapercibida, Meisy comentó que esto me ayudaría a mezclarme con el lugar y siento varios pares de ojos sobre mí al avanzar, trato de caminar lo más rápido que me dan las piernas, al llegar a las escaleras cubiertas de alfombra oscura para llegar a la zona VIP me relajo un poco, subo y en cuanto me acerco a la puerta escuchó los golpes provenientes del interior.
— ¡Oigan! ¡Ayuda…! Me quedé encerrado… y solo ¿¡Por lo menos pueden mandar a una chica aquí?!
Por todos los cielos… pongo los ojos en blanco y me recargo para mirar el lugar, el gerente ya fue notificado de mi llegada, así que no tarda en aparecer para abrir la puerta. El lugar desprende un aroma a alcohol y una combinación de perfu