Capítulo 60: Mil besos.
En la mansión Gibson, Emily se encerraba en su habitación, mientras se mordía las uñas ansiosamente. Aquella visión de Henry junto a aquel par de niños tan parecidos a él, la había perturbado; ¿Quiénes eran?, ¿Qué relación tenía su prometido con ellos?, y, ¿Acaso esos niños eran los mencionados hijos de Katherine Holmes?
Aquella última pregunta que Emily se había hecho a sí misma, la perturbó aún más…si esos niños resultaban ser los hijos de esa mujer, entonces, Henry ya sabía de su existencia, y eran sus hijos…y aquello, la hizo temblar.
—¿Por qué?, ¿Por qué Henry estaba con ese par de niños?, ¿Quién demonios son esos mocosos? — se cuestionó a sí misma.
Dejándose caer sobre su cama, Emily Gibson sollozó, al tiempo en que golpeaba los almohadones con sus puños. Se sentía incontrolable, con deseos de destruirlo todo a su paso; ella debía de ser la única mujer que le diera hijos al hombre al que amaba, ¿Incluso aquello le tenía que ser arrebatado por Katherine Holmes? Se cuestionó con a