Capítulo 146: Mi dulce hombre.
Ella lo quedó viendo.
Conmovida.
Ese hombre sí prestaba atención.
Ese hombre sí sabía observarla.
Ese hombre sí la acompañaba en todo momento.
No como Alphonse… él nunca la acompañó, nunca la vio, nunca la valoró.
Ese pensamiento pasó veloz por su mente… pero se esfumó enseguida ante la sonrisa cálida de Donovan.
Rosalind, llena de cariño, eligió al final una selección de tonos pasteles neutros y algunas pinturas especiales.
La gerente tomó nota de todo.
—¿Desea que lo enviemos directamente a su residencia? —preguntó con profesionalismo.
—Sí, por favor —respondió Rosalind—. A la Mansión Ainsworth. A nombre de la señora Rosalind Ainsworth.
La gerente sonrió.
—Será un placer. Lo enviaremos esta misma tarde.
Rosalind asintió agradecida.
En ese momento, su teléfono vibró.
Blink~
Era un mensaje de Grace.
[Señora, ya encontré casi todas las secciones. Encontré los pinceles de fibra suave, los blocs de bocetos tamaño mural, las bases de textura, y los pig