STAVROS
Me dice en tanto acaricio esos labios infernales, toda ella es una tentación y mas cuando esta en modo malvada, sexi e insaciable.
—Es toda tuya nena.
—Te extrañe bebe—le habla a la verga—que rico.
Con la primera lamida tiro la cabeza atrás con la electricidad que recorre todo mi cuerpo, cierro mis ojos disfrutando del placer que me proporciona el hecho de sentir como su lengua la pasea por los bordes de la cabeza para luego metérsela a la boca para succionar con fuerza.
El calor de su boca me encanta y el como se come mi polla con ganas también, ella no es cualquiera en el arte de mamar, no todas soportan en su boca una polla con una cabeza tremendamente gruesa que suele lastimar, pero a ella no, albergo también un tronco ancho con venas que se remarcan dándole para algunas una apariencia aterradora, pero a ella no le importa a la hora de recibirme completo en su interior.
Tampoco le molesta al meterlo por completo en su boca, es una garganta profunda que se la come toda mien