ANDROMACA
Es lo primero que pienso al ver a dos machos cavernícolas pelearse en plena vía publica como nos neandertales.
—Ya basta —llego separándolos con ayuda de Mirtajil y sus hombres—te calmas Stavros.
Este hecho un maldito toro desequilibrado, los dos están sangrando debido a sus fuertes golpes.
—Mi mujer no se sacrificará por la tuya—me toma del brazo haciéndome daño—no tenias derecho a ponerla en peligro sabiendo que ese hijo de puta la busca.,
—Suéltame ya—le grito—lo hice porque quise, porque es mi hermana y no la tuya—me da rabia su egoísmo—si tu no haces nada por ella yo sí, mientras que tu proteges a la puta de Agatha ella esta confabulada con Josep—no me suelta y estamos dando un espectáculo, pero no me importa—es la culpable del secuestro de mi hermana y tu aquí queriendo proteger a esa hipócrita.
—Te vienes conmigo.
—No—me impongo cuando tira—aquí me quedo porque tenemos un plan, si quieres puedes esperar, calmarte y cuidarme como tanto quieres, pero de aquí no me muevo