- Speicer, Spanky, agárrenlas- la voz alta de Zacarias resonó en todo el patio seguido por el ladrido de dos perros y el chillido de dos niñas.
-En serio no sé cómo fue que le pusiste esos nombres a tus perros. Debería darte vergüenza gritarlo todo el tiempo-Falcon pasó por su lado llevando una bandeja a la mesa de picnic que estaban preparando en el chalet.
-No quiero oír eso de ti que querías ponerles Baner y Flapi- se quejó Zacarias bajando los escalones y recibiendo lo que sus dos enormes y juguetones Golden Retriever traían consigo.
Cada uno soltó el borde del vestido de las dos niñas de cuatro años y se sentaron al lado de ellas.
-Lo único que sacaron de su madre fueron sus ojos. Son igualitas a ti- Falcon le pasó el brazo por encima del hombro- Hasta en el carácter. Mira esos pucheros- se rio.
-Cállate y ayúdame-
Cada uno de los alfas cargó a cada una de las niñas. Era como había dicho Falcon. Tenían el mismo color d