Todo lo que hago me recuerda de algún modo a él, pero estoy segura de que me ha olvidado, sin embargo, vive feliz su vida con Annalise.
El sol del atardecer se ve rojo sangre, haciendo que la manzana parezca aún más vibrante. La muerdo cuando una sombra cae sobre mí.
Mis ojos parpadean, pensando cómo no me di cuenta de que se acercaba. Esbozo una sonrisa y miro al alfa.
"Oh, hola", le digo.
"Nos volvemos a encontrar", dice con encanto. Su pelo castaño parece dorado al sol.
"Sí...". Le digo y empiezo a caminar cuando me agarra del brazo, el corazón me da un vuelco y al instante siento que me invade una oleada de inquietud.
"¿Puedo ayudarte Alfa?". Le pregunto bruscamente,
"Lo siento, no quería alarmarte. Pensé que necesitarías que te llevara. De hecho, iba a llamarte, pero estabas distraído", dice señalando su elegante coche.
Miro a mi alrededor, sintiendo las miradas perdidas de la gente sobre mí. Su atención hacia mí está creando rumores innecesarios.
"Por supuest