Romina estaba furiosa con Belio, había perdido por un momento en rastro de Skarlett, no había tomado el camino indicado por ella y se desviaron, no pasando por la emboscada que tenía preparado para ella.

—Eres un imbécil Belio...¿Cómo no pudiste hacer un simple trabajo? ¿Dónde se fue? Tienes que investigar. —renegó furiosa caminando de un lado a otro, habían perdido la oportunidad de desaparecer definitivamente a Skarlett.

—Cálmate Romina, dónde esté esa cría de pícara es lo de menos, tenemos a Arion muy vulnerable, es hora de acabar con él, hacerlo ver culpable, tan culpable que no tendrá posibilidad de declararlo inocente.

—Ya esperé años Belio...años. ¿Hasta cuándo sigo esperando? Ya no aguanto mas. —dijo eufórica.

—Ya es el momento, tenemos a Arion en nuestras manos, y cuando se entere de la desaparición de su hija , toda su atención será centrará en su búsqueda, y cuando la cría de pícara aparezca será mucho más sencillo desaparecerla a ella junto a su padre. —dijo Belio con una