Tras hacer que el joven regresara en sí, no dudó en acompañarlo hasta el hospital.
Patryce, entre el pánico y los nervios, le contó lo que su madre le había dicho por teléfono.
Siendo el primero en cruzar la puerta del hospital el chico y seguido por el hombre, fueron recibidos por la madre de Patryce.
-¡Mamá, mamá, cómo está...-
-Está bien, está bien- la mujer asió del rostro a su hijo y le miró fijamente -¿Dónde te metiste? Le he preguntado a él en cuanto ha salido de la inconsciencia y...¿Umm?-
Quedó en silencio al ver al hombre de piel oscura a unos cuantos pasos alejado de ellos.
Patryce logró liberarse de las manos de su madre para girando la cabeza darse cuenta que lo acababa de ver.
-¿Y quién es...-
-Mamá él es...te-te presento a Elliot...Bane- se dio prisa en presentarlo el joven.
Elliot dio un paso adelante al mismo tiempo que extendió una mano hacia la mujer.
-Es un placer conocerla, señora Connors- saludó educadamente.
Ella, ojiplatica y sin pestañear, aceptó su mano pa