--- Diego Sánchez ---
Luego de arruinar toda posibilidad con Isa, solo se me ocurrió venir a buscar a mi primo Cesar, seguramente me va a dar un sermón monumental, me duele la nariz, pasé al médico y por fortuna no me la rompió el idiota de Julián, pero sí que está inflamada y moreteada.
Al llegar a su apartamento, tocó el timbre e inmediatamente aparece Cesar, me ve con cara de susto y dice:
- ¿En qué demonios te metiste?
- ¿Me vas a dejar pasar? – Digo molesto.
Veo cómo él se hace a un lado y entro, dentro del apartamento de Cesar, logro ver a alguien, su silueta se me hace conocida, pero no logro dar con quién es hasta que es demasiado tarde.
- Diego… - Dice el hombre al voltear a verme.
- Tío… - Digo con un poco de vergüenza.
- Te preguntaría cómo estás, pero es evidente que no estás bien. – Dice mi tío en tono sarcástico.
- ¿Se nota? – Respondo igual.
- Un poco… - Responde indiferente.
- Veo que ya se toparon… - Dice mi primo como si esperara el apocalipsis.
El tío Héctor y yo no