Hades:
No solo fue el corazón de Lyra el que dejo de latir mientras un sumbido inundaba sus oídos, lo mismo les ocurrió a todos los presentes, quienes volteaban lentamente sus rostros para observar el de Hades.
Lívido, petrificado, sin saber que demonios hacer o decir, el observaba al chico frente a él.
El parecido con Lyra era impresionante, incluído su semblante demacrado por la inhanicion.
Acababa de anunciar públicamente que torturaria al hombre frente a él, sin embargo esto era antes de saber su parentesco con la única mujer que había ofrecido su sincera, pura y genuina amistad.
El rey de mirada púrpura no se atrevió a voltear hacia Lyra, quien seguramente estaba aterrada ante lo que él, el monstruo del castillo, podría llegar a decir.
—Viniste a buscar a tu hermana como si hubiera que rescatarla—comenzo a ronronear Hades mientras hacia una seña a sus guardias para que lo soltaran—. Quiero informarte que todas las damas que se encuentran en esta habitación vinieron por voluntad p