Capítulo 113 Tu cuerpo se vuelve un hogar
Michael respiró agitadamente. Cuando los vio entrar a una consulta, su cara se oscureció.
— ¿Están juntos en esa consulta? ¿Es que acaso…? ¡Ese maldito! No, no puede ser, Luca no se atrevería a dejarla embarazada, y ella tampoco. Estuvimos juntos tanto tiempo y ella se cuidó de eso… ¿Cómo es que ahora? —Su voz era apenas perceptible.
La enfermera hizo el intento de rodar la silla hasta la habitación, pero él no lo permitió.
— ¡Espera!
— ¡Tengo que llevarlo a su habitación, Señor! ¡Colabore!
Michael se agarró a la silla de ruedas. Desafiante, ignoró las palabras de la enfermera. Su mente estaba fija en una sola imagen: ella y Luca entrando juntos en ese consultorio.
— ¡Señor! —protestó la enfermera.
—Llévame hasta allí y haré lo que digas —señaló con el dedo el lugar.
Ella decidió llevarlo. Algunas personas ya se habían detenido a observarlo, al verlo tan alterado. Lo condujo y se detuvo cuando él se lo indicó.
— ¡Aquí!
Michael observó el aviso