Me duele la cabeza, estoy como desorientado, ¿qué pasó? ¿Dónde estoy? El bip-bip que escucho, junto con esa peste molesta a desinfectante solo significan una cosa: hospital, o como mínimo, una sala de emergencias. ¿Cómo es que llegué aquí?
Lentamente abro mis ojos, los noto como si cada párpado pesara una tonelada y me late la cabeza, más puntualmente en el lado de la sien izquierda. Mi brazo también está como encadenado a una de esas pesadas bolas que usaban los presos, y me cuesta casi la vida el alzarlo, mas cuando por fin lo consigo, puedo tantear que tengo una venda en la cabeza. ¿Qué diablos?
Recorro mi entorno y consigo reconocer la clínica de Alfonso, lo cual me indica que algo ocurrió, solo que no alcanzo a recordar el qué. ¿Por qué estoy herido e internado? Un gemido bajo y femenino se escucha a un lado de mí y me encuentro con la corta cabellera de mi madre, la cual parece estar dormida apoyada sobre el costado de mi cama, ¿cuánto tiempo lleva ahí? Con suavidad acaricio su