Rubí negó con la cabeza y dijo:
—Está bien. Vamos a comer. Tu papá no volverá a almorzar, así que iré a preparar la comida. ¿Qué quieres comer?
—Mami, quiero comer paella y... y... lasaña —dijo Dylan.
Esta fue la primera vez que Dylan pidió comer algo. Cuando llegó Rubí por primera vez, conseguir que comiera ya era muy difícil. Más tarde, entre la comida que cocinaba Rubí, comía más de la comida que le gustaba y comía menos de la que no le gustaba, pero esta era la primera vez que pedía comer algo. Dylan se había recuperado muy bien recientemente y estaba mejorando cada día.
Rubí lo miró y le dijo de manera alentadora:
—¿Hay algo más que quieras que cocine? Mamá te lo cocinará.
Dylan frunció el ceño y pensó por un momento, pero luego miró a Rubí y dijo:
—No, papá dijo que es muy agotador para mamá cocinar para mí. No puedo ser quisquilloso con la comida, así que no puedo pedir demasiado, y también tengo que tener en cuenta que a mamá le gusta comer. De lo contrario, mamá se pondrá tri