REGLA # 1. CAPÍTULO 29. Ni cómo defenderse...
La biblioteca del castillo estaba silenciosa, iluminada por la luz cálida de una lámpara de escritorio, porque aunque todavía era de día, la tarde se había vuelto gris y fría.
Mariel estaba sentada frente a una pila de libros y su laptop, ajustando detal